
La guerra contra las políticas de inclusión en el ejército de Estados Unidos que prometía el nuevo secretario de Defensa, Pete Hegseth, ya está en marcha. Una orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump se dirige específicamente contra los militares trans, así como contra otras minorías, bajo el argumento de que las Fuerzas Armadas han quedado afectadas por la “ideología radical de género”.