Es sabido que todo lo que va antes de un “pero” pierde peso. Y eso es lo que estamos viviendo con Siria estos días. Muchos peros, infinidad de peros que restan valor a un hecho histórico: en Siria ha caído una dinastía culpable de convertir el país en una gigantesca fosa común, y esto en sí es digno de celebración por parte de toda la humanidad. “Pero los islamistas”, “pero Libia”, “pero Afganistán” se le advierte a la población siria, como si esta pudiera ser ajena a las amenazas que se ciernen sobre su país. Parémonos un momento y, antes de embarcarnos en la lista de peros, tomemos conciencia de lo que está en juego.