
Antes de convertirse en un aliado clave del oficialismo para aprobar las grandes reformas en el Congreso, el expanista Miguel Ángel Yunes Márquez era uno de los principales enemigos de Morena en Veracruz. El partido en el Gobierno se dedicó a combatirlo ferozmente a él y a su familia, que retiene un enorme control político en el Estado sureño y es dueña de una gran fortuna, según denunció hace algunos años el propio Andrés Manuel López Obrador, patriarca morenista. El clan Yunes, que toda la vida ha militado en el PRI y luego en el PAN —antes de unirse a Morena—, arrastra una larga lista de escándalos e investigaciones penales que pasan por enriquecimiento ilícito, blanqueo de capitales, quebranto al erario y fraude. Hace pocos días, Adán Augusto López, coordinador de Morena en el Senado, declaró que Yunes Linares, expulsado del PAN, ya formaba parte del grupo parlamentario oficialista. Ese traspaso es solo una etapa más en la trayectoria política del clan Yunes.