Tres magistrados del Tribunal Superior de Bogotá tienen lista una decisión clave para el futuro político de Colombia. Ya llegaron a una conclusión sobre la apelación que hizo el expresidente Álvaro Uribe Vélez a una sentencia de primera instancia que, en agosto, lo encontró culpable de los delitos de fraude procesal y soborno de testigos. La decisión de la jueza Sandra Heredia condenó al expresidente de derechas a 12 años de prisión domiciliaria, y decidió que esa pena era de aplicación inmediata. El político apeló y logró que la justicia anulara la obligación de cumplir la sanción, de tal forma que se le permitiera continuar en libertad mientras se decidía la segunda instancia.
