La Comisión Europea ha dado el visto bueno al plan fiscal español para reconducir la deuda. Sin embargo, tras este examen, ha reclamado a España medidas adicionales por valor del 0,3% del PIB, dos décimas en aumento de ingresos y una en rebaja del gasto. Son unos 4.500 millones de euros tomando las magnitudes económicas de este año, pero conforme la economía crezca deberían suponer una cantidad superior para 2028, último año del plan de ajuste que el Gobierno ha presentado en Bruselas. El Ejecutivo europeo pide unos 1.500 millones más por la reforma impositiva, otros 1.500 millones eliminando beneficios fiscales y 1.500 en ganancias de eficiencia en el gasto público. Es decir, una décima del PIB por cada elemento.