El Ayuntamiento de Barcelona ha invertido 7,7 millones de euros en el mantenimiento, mejora y renovación de las fuentes ornamentales de la ciudad, tanto para actuaciones en fuentes dañadas durante las restricciones por sequía como otras obras de mejora, según informó ayer el Consistorio en un comunicado. La Fuente Mágica de Montjüic, una de las más representativas de la ciudad, lleva desde noviembre de 2022 sin poder funcionar a causa de la falta de lluvias.